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Un llamado a repensar las estrategias de financiamiento climático desde una perspectiva centrada en los productores

COP28 y la necesidad deuna financiación climática que incluya a los pequeños productores

A medida que el mundo converge en la COP28, un evento con enfoque en el medio ambiente, las personas, y sus medios de vida, ha llegado el momento de reformar la narrativa alrededror de la acción climática. Hacer que el financiamiento climático se centre más en los productores no es sólo un imperativo ético sino una medida estratégica para la seguridad alimentaria mundial y el futuro sostenible de las comunidades agrícolas de pequeña escala. Es por eso que en la COP28, Solidaridad hace un llamado a los formuladores de políticas y tomadores de decisiones para aprovechar este momento y dar pasos tangibles hacia una financiación climática más inclusiva para los productores. El tiempo corre y lo que está en juego no podría ser más importante.

COP28 y la necesidad deuna financiación climática que incluya a los pequeños productores

Dentro de la vasta extensión de la agricultura mundial, donde las pequeñas propiedades familiares representan un asombroso 85% de las 570 millones de fincas en todo el mundo, una cuestión crítica está surgiendo entre las sombras: el impacto desproporcionado del cambio climático entre quienes cultivan la tierra. Mientras los productores lidian con los impredecibles caprichos del clima y la decreciente calidad del suelo, es evidente que la actual narrativa alrededor de la acción climática no está abordardando adecuadamente sus desafíos específicos.

Los medios de vida de más de 2.500 millones de personas dependen de la agricultura a pequeña escala, pero sus voces a menudo quedan ahogadas bajo las discordantes políticas climáticas globales. La urgencia de este asunto se ve reflejada en el Small Farmer Atlas de Solidaridad, una extensa encuesta que abarca 18 países y más de 10.000 pequeños productores. En ella, se destaca que las preocupaciones relacionadas con el clima no son secundarias, sino que encabezan la lista de preocupaciones de los productores agrícolas.

COP28, Javier López, productor de café de Nicaragua encuestado en el Small Farmer Atlas

El Sexto Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC AR6) publicado recientemente y el diálogo técnico en torno al Informe del Balance Global de la CMNUCC de 2023 subrayan la vulnerabilidad de los pequeños productores de alimentos a a nivel mundial. A pesar de haber acuerdo en el hecho que los fenómenos climáticos extremos que están sufriendo los productores son debidos al cambio climático, la acción climática actual sigue siendo insuficiente para cumplir los objetivos del Acuerdo de París que pueden prevenirlos o paliarlos.

Frente a esta realidad apremiante, se necesita urgentemente un plan de acción climática sólido, que coloque a las comunidades agrícolas de pequeña escala en el centro de las intervenciones. El diálogo técnico del primer balance mundial enfatiza acertadamente el imperativo de apoyar transformaciones agrícolas que integren la resiliencia climática y el desarrollo bajo en emisiones. Sin embargo, el eslabón perdido reside en la insuficiencia de los mecanismos financieros actuales y su incapacidad para empoderar a los grupos vulnerables.

Afortunadamente, en la COP28 somos testigos de un mayor enfoque en el medio ambiente, las personas y sus medios de subsistencia dentro de la acción climática. Un plan rápido de acción climática en los próximos años es crucial para abordar los desafíos donde se cruzan la alimentación, la naturaleza y la agricultura a pequeña escala. Instamos a los responsables de políticas y decisiones a considerar las siguientes cuatro recomendaciones:

1. Incrementar y mejorar el acceso al financiamiento climático:

A pesar de estar en primera línea a la hora de enfrentar el cambio climático, las comunidades rurales de pequeña escala a menudo carecen de los recursos financieros para implementar soluciones efectivas de adaptación climática que sean bajas en emisones de carbono. De acuerdo con la decisión de la COP 27 (en inglés), el financiamiento climático acelerado es uno de los elementos más críticos para que las comunidades agrícolas de pequeña puedan fortalecer su resiliencia y reducir su vulnerabilidad al cambio climático.

  • Cumplir las promesas de, al menos, duplicar el nivel de financiamiento destinado a adaptación de 2019 para 2025.
  • Llevar el nuevo objetivo de financiación climática a partir de 2025 a más de 100.000 millones de dólares anuales.
  • Avanzar en el establecimiento de una Meta Global de Adaptación que incluya principios para una adaptación liderada localmente (en inglés).

2. Canalizar el financiamiento climático hacia soluciones lideradas localmente, equitativas en términos de género e inclusivas:

Los productores enfrentan barreras importantes para acceder al financiamiento climático. Es vital mejorar las modalidades y los instrumentos utilizados para que las comunidades agrícolas accedan a él. Las soluciones de arriba hacia abajo para la adaptación suelen ser ineficaces e insostenibles (en inglés). Con frecuencia, los programas no se alinean con las prioridades y necesidades específicas de las comunidades vulnerables, lo que genera efectos adversos en los resultados de la adaptación y la posible exacerbación de la desigualdad social.

Por el contrario, la acción y el financiamiento liderados localmente contribuyen a un mejor acceso, intervenciones más rentables y mayores ingresos. Esto conduce a una prestación más eficiente de servicios, e incentiva a los actores locales (en inglés) a gastar los escasos recursos financieros de manera más efectiva.

Estos principios son afirmados por el diálogo técnico dentro del Informe del Balance Global de la CMNUCC,10 que establece que «cuando la adaptación está informada e impulsada por contextos, poblaciones y prioridades locales, se mejoran tanto la adecuación como la eficacia de las acciones y el apoyo a la adaptación».

Esta perspectiva se ve reforzada aún más por el espíritu del movimiento «Shift the Power» en inglés o “Cambia el poder” en español, que desafía el paradigma convencional verticalista. En esencia, este movimiento defiende la creencia de que las partes interesadas locales deben participar activamente en el diseño y la implementación de proyectos que impacten directamente sus vidas.

3. Proporcionar financiamiento climático que impulse servicios ecosistémicos más amplios.

En el contexto de la agricultura a pequeña escala, las estrategias fundamentales para garantizar la seguridad alimentaria y reforzar la resiliencia de los prodcutores están estrechamente ligadas a soluciones basadas en la naturaleza (en inglés). Estas abarcan prácticas como la agrosilvicultura, la agricultura regenerativa y climáticamente inteligente, los principios agroecológicos y la gestión basada en los ecosistemas. Estas prácticas también pueden contribuir a mejorar el almacenamiento natural de carbono, la biodiversidad y otros servicios ecosistémicos vitales. Esto los hace también atractivos para el financiamiento privado (en inglés) a través de los mercados de carbono.

La colaboración continua entre Solidaridad y la iniciativa Acorn de Rabobank (en inglés) sirve como testimonio de la efectividad de estas estrategias. Al adoptar prácticas agroforestales, más de 50.000 productores ya han experimentado beneficios tangibles y han sido testigos de una mejora tanto en sus ingresos como en su resiliencia. Las iniciativas de pago por servicios ecosistémicos (PSA)  proporcionan incentivos esenciales para invertir en una agricultura y producción de alimentos sostenibles.

Para ampliar tales iniciativas, existe una necesidad apremiante de financiamiento climático. Este apoyo financiero juega un papel crucial a la hora de cerrar el período de inversión para los pequeños productores, asegurando que puedan cosechar los beneficios de sus prácticas sostenibles y fomentando la resiliencia a largo plazo dentro de las comunidades.

  • Aprovechar las soluciones basadas en la naturaleza, como la agrosilvicultura y la agricultura regenerativa, para incrementar la seguridad alimentaria y la resiliencia de los productores.
  • Utilizar financiación climática para cerrar los períodos de inversión de los pequeños productores y que puedan materializar los beneficios de sus prácticas.

4.Establecer normas habilitantes para las eliminaciones naturales de carbono:

El artículo 6.4 del Acuerdo de París proporciona una estructura para un mercado de créditos de carbono en que las emisones de gases de efecto invernadero evitadas o reducidas pueden transferirse internacionalmente. Una regulación habilitante es crucial para incentivar inversiones en soluciones basadas en la naturaleza que eliminen carbono de la atmósfera y garanticen beneficios justos para los pequeños productores que brindan servicios ecosistémicos vitales. El mercado voluntario de carbono proporciona lecciones sobre cómo esto puede regularse efectivamente, incluyendo, entre otros, la gestión de la no permanencia y las fugas, la línea de base, las metodologías de adicionalidad y los sistemas eficientes de Medición, Informe y Verificación.

  • Crear un marco regulatorio propicio para facilitar y fomentar las inversiones en la eliminación de carbono basada en la naturaleza y otras prácticas agrícolas sostenibles.
  • Garantizar que dicho marco proporcione a los administradores de tierras y a los agricultores los incentivos y recompensas necesarios para adoptar prácticas agrícolas sostenibles.
  • Tener en cuenta las lecciones del mercado voluntario de carbono y del Mecanismo de Desarrollo Limpio de Aforestación/Reforestación.

Contacto

GONZALO LA CRUZ

Director Regional

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