A raíz del intercambio de experiencias entre caficultoras de Honduras y Colombia, se identificaron buenas prácticas y estrategias de negocios para mejorar la competitividad de las mujeres productoras.
La marca de Café Brisas es la culminación de un proceso de fortalecimiento nacido en la empresa de economía social PROEXO, conformado por 246 productores y productoras, que con el acompañamiento técnico de Scarlette Zerón, Gerente de Proyectos de la empresa, han logrado establecer una marca colectiva de café producido exclusivamente por mujeres.
Esta iniciativa nace durante el intercambio de experiencias promovido por Solidaridad en Honduras, con el acompañamiento de la Cooperación Técnica Alemana al Desarrollo (GIZ) y el Instituto Hondureño del Café (IHCAFE); entre entre productoras hondureñas de las diferentes regiones cafetaleras del país y productoras de la Asociación de Mujeres Cafeteras del Cauca AMUCC, con la asistencia del Parque de Innovación Tecnológica en Café TECNICAFE.
Durante el intercambio se visitaron diferentes fincas de café, además de instalaciones de procesamiento de café donde las participantes pudieron observar diferentes métodos de selección, mecanizado de los granos, despulpado, secado, almacenamiento y ejercicios de catación. Por el otro lado, se compartieron experiencias sobre modelos asociativos, innovación transformativa en el sector café, y mecanismos financieros, tales como la aplicación de un fondo revolvente, negociación, y crecimiento empresarial con enfoque sostenible.
La importancia de estos intercambios radica en que son una oportunidad de conocer de primera mano la experiencia, en este caso, de la AMUCC, su historia, retos, logros y desafíos que ponen en perspectiva las acciones que se implementan en nuestras organizaciones.
Impulsar el liderazgo de mujeres marca la diferencia
Para Scarlette Zerón, este proceso le permitió observar, aprender y aplicar estos conceptos en su propia organización. “Las productoras de AMUCC comenzaron con el acopio de café en bloque, y con su aliado técnico, empezaron a adquirir conocimientos en sellos de certificación, manejar sus propios recursos, aprender de buenas prácticas agrícolas para mejorar sus procesos, y especializarse en control de calidad” nos cuenta Scarlette.
Mujeres caficultoras de AMUCC compartieron sus procesos de fortalecimiento. Hoy, gracias a su liderazgo y a un fondo rotatorio, han logrado café orgánico que pueden vender a mejor precio. Esto ha mejorado sus medios de vida.
De una idea, a una realidad
Inspirada por lo observado en Colombia, Scarlette, se propuso compartir esta experiencia con el grupo de mujeres de PROEXO en el taller “Jornada de empoderamiento empresarial de la mujer” donde además se dieron a conocer temas sobre empoderamiento, certificación bajo el sello “Manos de mujer”, trazabilidad digital y tecnología blockchain; motivando al grupo a crear su propia marca de café de mujeres.
Para Scarlette, una de las mejores estrategias que puede utilizar una caficultora es asociarse a un grupo de productores de café donde sienta que se comparten los objetivos, los valores y la filosofía o propósito de vida para acompañarse en el desarrollo y crecimiento en sus diferentes ámbitos como ser personal, profesional, productivo y empresarial, ya que al estar asociadas puede obtener mayores oportunidades de formación, asesoría en campo, acceso a fondos revolventes, micro-financiamientos, emprendimientos y acceso a mercados más justos, inclusivos y especializados que valoren y paguen de acuerdo a sus buenas prácticas y calidad.
Para finalizar el taller, se trabajó con las productoras en la creación de su marca de café, Brisas. “Lo que hicimos fue crear tres grupos para que ellas seleccionarán de una cantidad de muestras qué tipo de empaques y etiquetas les gustaba más, utilizando el empaque de café de AMUCC como referencia. Algo en lo que todas las productoras estuvieron de acuerdo fue que también querían que saliera su información en el empaque, pero ellas querían que fuera en forma de código QR” nos cuenta Scarlette.
Al terminar el taller, las participantes presentaron las ideas de lo que ellas deseaban como empaque. “Estas ideas se las pasamos a la diseñadora de GIZ que logró crear un empaque incorporando todos los elementos que deseaban” nos comenta.
Las alianzas con diferentes organizaciones contribuyen a lograr nuestro objetivo
La GIZ apoyó a las productoras con un estudio de mercado y, combinando las ideas y los hallazgos de estudio, se lanzó la marca este octubre.
Hicimos el lanzamiento de la marca con ellas, ya que para nosotros, las protagonistas son ellas. Queríamos que ellas vieran el resultado de sus ideas y que vieran que es real, que ellas van a recibir un diferencial por ese café, y que van a poder tener diferentes líneas de comercialización.
Scarlette
“La marca para nosotros es una plataforma de empoderamiento para la mujer ya que se crea con la visión de que pueda ser un apoyo, y que de esta manera ellas puedan encontrar aliados para en el futuro quizá crear su propia empresa” nos comenta Scarlette.
Ahora, la organización está buscando conseguir un fondo y trabajar con aliados para avanzar en temas de emprendimiento y poder replicar el modelo de fondo revolvente aprendido en Colombia.
Ya se firmó un contrato con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para proveerles café durante un año y eso es para nosotras un gran logro. Nuestro siguiente paso es establecer puntos de venta en supermercados y con los aliados de cooperación y donantes. Además buscamos obtener un precio competitivo de reventa lo que les otorgará a las productoras un ingreso extra por la venta de su café.
Scarlette
Un paso más por la caficultura hondureña
El lanzamiento de la marca de café se vuelve posible gracias a la colaboración de Solidaridad, INATrace de GIZ, Rainforest Alliance y el proyecto Coffee Chain de Heifer Internacional que buscan empoderar a las mujeres productoras, mejorar la sostenibilidad del café, apoyar la trazabilidad y aumentar sus ingresos.
“Este lanzamiento marca un hito en la historia de la caficultura hondureña ya que no solamente logra posicionarse como un proyecto social que empodera las mujeres en la cadena de valor de café, sino también busca que esta sea una plataforma que traiga crecimiento y desarrollo a las mujeres, sus familias y sus comunidades por medio de un café de especialidad respaldado en tecnología digital que busca mostrar a los consumidores finales la historia de su origen y la trazabilidad, logrando establecer relaciones comerciales sólidas y estables que brinden ingresos justos.” nos comentá Scarlette.
“A partir del intercambio de experiencias lo que queremos lograr es levantar la caficultura hondureña” nos cuenta Sofía Núñez, Gerente de Solidaridad en Honduras.
Para Solidaridad es vital generar un cambio duradero con los productores y productoras que trabajamos, por ello en Honduras trabajamos con varios proyectos en dónde hemos impulsado la Política de Género en el Subsector Café, apoyado en la obtención de títulos de propiedad e invertido en sistemas agroforestales.