Empoderar a las mujeres es parte integral del desarrollo sostenible. WALC desarrolla capacidades en las mujeres para que transformen sus comunidades al mismo tiempo que persiguen sus objetivos personales.
Mujeres en Liderazgo Agroecológico para la Conservación (WALC) genera oportunidades para que las mujeres mayas q’eqchi se integren en la conservación del bosque nuboso.
La iniciativa Mujeres en Liderazgo Agroecológico para la Conservación (WALC, por sus siglas en inglés) es una experiencia de 25 días que combina la planificación de la vida con actividades de conservación, salud y agroforestería para educar y empoderar a jóvenes para la toma de decisiones responsable.
Enseñemos a las mujeres a valorar y continuar su educación
Las participantes son mujeres mayas q’eqchi que provienen de aldeas del bosque nuboso del altiplano del norte de Guatemala, donde la tasa de deserción escolar de las niñas en la escuela secundaria es alarmante — un 75% cada año.
El curso “Proyecto de vida” es un componente importante del programa, que alienta a las estudiantes a desarrollar la conciencia de sí mismas y ver su condición como mujeres de una manera positiva. Les ayuda a descubrir sus dones y habilidades; también a planificar su futuro a través de actividades de establecimiento de metas.
“Las jóvenes toman decisiones sobre su futuro. Las señoritas que completan el programa lo hacen habiendo identificado un propósito en sus vidas”, dijo Rob Cahill, de Community Cloud Forest Conservation (CCFC), Director del programa.
WALC desarrolla capacidades en las mujeres para continuar dando pasos hacia la sostenibilidad de nuestras cadenas de valor.
Además, para poder participar, deben comprometerse a continuar con su educación. A través de este programa y el curso de planificación de vida, CCFC ha contribuido con éxito a reducir la tasa de deserción, que ahora es menos del 5% entre las participantes de WALC.
Varias de las estudiantes provienen de comunidades cacaoteras con las que ha trabajado Solidaridad como patrocinador para que las hijas de los productores puedan recibir los beneficios del programa de liderazgo.
Al tiempo que WALC desarrolla capacidades de liderazgo en las mujeres, las empodera con conocimientos y habilidades para crear un cambio duradero en sus comunidades.
“El trabajo de WALC con las jóvenes en Guatemala es un vivo ejemplo del change that matters que busca Solidaridad, en donde el cambio no solo se da a nivel de las habilidades o conocimientos que puedan desarrollar las mujeres, si no que se logra una transformación a nivel personal. Esto hace que las jóvenes puedan ampliar su visión en búsqueda de mejores o nuevas oportunidades para su desarrollo”, comentó Patricia Gómez, Especialista en Planificación, monitoreo, evaluación y aprendizaje para la región en Solidaridad.
El curso Proyecto de vida brinda un empujón a las participantes para seguir adelante, según Ingrid Xuc, ex alumna del programa proveniente de San Lucas de Aguacate, una de las comunidades en las que ha trabajado Solidaridad.
“Las señoritas se reconocen [a sí mismas], reflexionan y trazan una nueva línea para seguir un nuevo camino y organizan… planifican por objetivos su propósito ”, expresó Ingrid.
Mujeres empoderadas equivale a comunidades empoderadas
La historia de Ingrid es una confirmación de cómo WALC desarrolla capacidades en las mujeres en temas de autoconciencia y planificación de vida y cómo esto puede tener un impacto tremendo en sus vidas y en el bienestar general de sus comunidades. Ingrid completó sus estudios secundarios y actualmente se encuentra estudiando a nivel universitario un profesorado en enseñanza media en educación intercultural, con énfasis en cultura maya.
La comunidad que se forma a través de WALC desarrolla capacidades en las mujeres en un entorno de colaboración y respeto mutuo.
“Recomiendo este programa. En mi comunidad, nos ayuda a buscar nuevos horizontes, porque estamos muy aislados. En mi segunda sesión, me tuvieron confianza para trabajar en la huerta. El trabajo es una oportunidad de convivencia y el tiempo pasa volando ”, dijo Ingrid.
Con su experiencia de liderazgo a través de WALC, y la preparación académica que está cosechando activamente, Ingrid está bien posicionada para convertirse en un agente de cambio en San Lucas de Aguacate.
Otro ejemplo es Vilma Toc, quien, después de participar en el programa durante cinco años, en 2018 representó a WALC y a Solidaridad en la Conferencia Mundial del Cacao, sumándose a la discusión sobre cómo el empoderamiento de las mujeres beneficia a todos en la cadena de suministro del cacao, el tema central para el primer día de la conferencia.
Durante su tiempo en el programa hace unos años, Vilma primero fue estudiante y finalmente se convirtió en líder, trabajando a la par del personal para dirigir y orientar a sus compañeras en el programa. Vilma también cursa la universidad ahora, estudiando para ser enfermera.
Debemos desarrollar las capacidades de las mujeres para que impulsen cambio significativo
Rob y su esposa Tara iniciaron el programa en 2007, impulsados por la idea de que las mujeres rurales pueden transformar la forma en que sus comunidades se relacionan con el bosque nuboso en el que se desenvuelven.
“Cuando educamos y empoderamos a las mujeres para tomar decisiones responsables, realmente creemos que eso se traducirá en un beneficio social, un beneficio económico y un beneficio ambiental”, expresó el Sr. Cahill.
El sistema agroforestal es una de las estrategias que Solidaridad utiliza para transformar paisajes en sistemas sostenibles.
Además, WALC desarrolla capacidades en las mujeres para comprender problemas prevalentes en la región que les afectan a ellas y a sus familias, incluida la deforestación y sus efectos en el ecosistema que les rodea. A través de los cursos restantes del programa, biología de la conservación y sistemas agroforestales, las estudiantes aprenden a mejorar la producción de sus plantas tradicionales y se les anima a practicar lo aprendido estableciendo una parcela de 20 metros cuadrados en casa.
“Recomendamos al menos 16 árboles, y debajo de eso agregan … arbustos y árboles frutales … otros cultivos y flores que hacen un hábitat biodiverso, imitando el bosque nuboso”, comentó Tara Cahill.
Los Cahill y las prácticas que les enseñan se han convertido en modelos importantes para las jóvenes. Las alumnas egresadas como Vilma Toc expresan que entienden completamente la importancia de la biodiversidad y llevan este nuevo conocimiento a sus familias, especialmente a sus padres, quienes típicamente se enfocan en la producción de monocultivos.
El programa de liderazgo en la actualidad
En la actualidad, la iniciativa continúa atrayendo participantes de más de 40 aldeas en el área de Cobán y también está trabajando con ex alumnas a través de un programa de estudio y trabajo, para que las estudiantes que completen sus estudios secundarios puedan asistir a la universidad pero también tengan un pequeño ingreso a través de una pasantía remunerada. Ellas forman parte del personal, apoyan a las nuevas participantes en el programa y pueden costear algunos de los gastos asociados con asistir a la universidad.
Rob y Tara Cahill se han ganado un lugar muy especial en el corazón de miles de señoritas que han pasado por el programa en los últimos 13 años.
“Veo la capacidad y paciencia que tienen [los Cahill]. A pesar de la gran responsabilidad que tienen, buscan la manera de ver una imagen positiva para las señoritas y para las maestras. Admiro la capacidad de trabajo que tienen; son un ejemplo a seguir. En mi casa son muy respetados; en mi familia son como abuelos para nosotros también”, dijo Ingrid Xuc.
Las mujeres rurales tienen el potencial de liderar el cambio en nuestros paisajes, para transformar comunidades en sistemas sostenibles que mantienen un equilibrio armonioso entre satisfacer nuestras necesidades y proteger los recursos para las generaciones venideras. Es necesario desarrollar las capacidades de liderazgo de estas mujeres para que puedan explotar su potencial al máximo y se integren a la conversación, impulsando acciones de sostenibilidad.
Ingrid Xuc, Lilia Choc, Sílvia Mez, y Mirna Xuc entraron al programa como participantes y ahora trabajan con los Cahill como pasantes remuneradas para continuar sus estudios universitarios.
“La inclusión y empoderamiento de las mujeres por Solidaridad y Community Cloud Forest Conservation (CCFC) potenció a WALC con la capacitación de más de 200 jóvenes mujeres en los años 2018-2019. Debido al éxito del modelo se gestionan recursos para escalar en otras regiones donde trabaja Solidaridad y sus socios”, manifestó Flavio Linares, Director Técnico de Programas de Solidaridad.