José Silva Rosa, alias Zezinho, fue recientemente homenajeado e invitado a participar del Salon du Chocolat de París, en representación de todos los productores familiares de la Amazonía que junto a él participan del proyecto «Territorios Inclusivos y Sostenibles en la Amazonía».
El 95% de la producción global de cacao está en manos de agricultores familiares. Este es uno de los mensajes del Salon du Chocolat de París que, entre hoy y el 4 de noviembre, reunirá a los más reconocidos profesionales y expertos en chocolate de los cinco continentes para ayudar al público a apreciar mejor el chocolate y a comprar de forma más informada y responsable.
Allí estará presente Zezinho, junto a otros productores de Sudamérica, África, y Asia, presentando al público el cacao amazónico con que se elaboran los chocolates artesanales Bean to Bar de Tuerê.Zezinho fue invitado por la CEPLAC (Comisión Ejecutiva de Planificación para el Cultivo del Cacao), a representar a sus colegas productores de Novo Repartimento, debido a la dedicación puesta en la mejora de la calidad de sus almendras.
Cacao sostenible e inclusivo de la Amazonia
Antes de participar del Salon du Chocolat, Zezinho ya había sido homenajeado en la 5ª edición del Festival Internacional del Chocolate y el Cacao de la Amazonia, el mayor encuentro del sector del cacao de la región, en la capital de Pará, Belém.
«La mejora de las almendras y la producción de chocolate representan un salto en mi vida. Primero, porque nunca habíamos hecho viajes como este a Belém, no existía la posibilidad. Y ahora también porque n estamos siendo reconocidos, en medio de mucha gente que sólo quiere ayudar. Estoy muy feliz», cuenta Zezinho.
De los 150 productores familiares que participan del proyecto, 48 viajaron al festival desde el asentamiento de Tuerê, en el municipio de Novo Repartimiento, en el suroeste de Pará.
Más de 60 mil personas pasearon por el evento, que contó con una exhibición de marcas de chocolate, una feria de flores amazónicas, debates sobre la producción de cacao y chocolate, talleres, clases prácticas, actividades infantiles y presentaciones culturales.
Solidaridad participó del evento con un stand dedicado al proyecto «Territorios Sostenibles e Inclusivos». Allí los productores ofrecieron muestras de su cacao y se exhibió el chocolate «Tuerê», eleborado por la chocolateria Casa Lasevicius, con el cacao cultivado por Zezinho. Su establecimiento, Tres Hermanos, fue la primera en desarrollar las técnicas de fermentación y almacenamiento de cacao estimuladas por el proyecto. Su éxito fue tan rotundo que, en medio de las actividades de cierre, la comisión organizadora del festival homenajeó al productor y su familia por la iniciativa.
Quienes visitaron el stand pudieron también conversar con el equipo de Solidaridad y conocer más sobre la iniciativa,que tiene como objetivo crear un modelo sostenible de agrigultura familiar en el contexto de la Amazonia. Para esto, el proyecto ofrece:
- asistencia técnica continua, con visitas mensuales a los productores;
- capacitaciones grupales que abordan diversas prácticas sobre cacao, ganadería, adecuación ambiental y conservación del bosque;
- y la implementación de unidades demostrativas donde se muestran los beneficios del modelo promovido por la organización en la práctica.
Paulo Lima, coordinador de proyectos Agropecuarios de Solidaridad, contó que este año el chocolate ya había ganado una mención en la degustación a ciegas de chocolates de almendras nacionales del Bean to Bar Chocolate Week 2018, realizada en São Paulo, en mayo. «Este reconocimiento hace también que los productores visualicen la posibilidad de incrementar sus ingresos a partir de la venta al sector del Bean to Bar, en el que el valor de la almendra es hasta tres veces mayor que el del mercado común», subrayó.
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Para Pedro Sousa dos Santos, consultor de Solidaridad en Novo Repartimento, la participación en el evento fue una gran oportunidad para que los productores entiendan que ellos mismos son un factor determinante dentro de la cadena. «Ellos están muy contentos por todo lo que están viendo en las conferencias, cursos y discusiones. Y entendieron que una almendra exitosa depende de una buena fermentación y calidad. Por eso creo que cuando volvamos a Novo Repartimento, ellos van a querer trabajar para que su cacao también se convierta en un chocolate como el de Zezinho», observó.
José Fernando da Silva Araújo, con 26 años, representa a la nueva generación de agricultores de Tuerê. «Quiero venir aquí en el futuro y que las almendras de mi finca estén aquí, y que ustedes estén probando mi chocolate. José (Zezinho) en este momento se ha convertido en una inspiración para mí. Yo vi lo que él trabajó, y vi en sus ojos la satisfacción por su cacao, por estar aquí siendo un éxito», dijo.
Mariana Pereira, gerente del proyecto, destacó que la participación de los productores en el festival fue un importante resultado. «Es de ellos de quienes se está hablando en todo momento, por eso son ellos quienes tienen que estar aquí, para oír, preguntar y debatir. Estar aquí, con este excelente chocolate y con Zezinho recibiendo aplausos de cientos de personas y siendo citado por los oradores, es una celebración», concluyó.
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