La entrevista
I: Para mí nuestra finca no te puedo decir que es modelo, pero en lo que refiere a activos y pasivos, tenemos más activos que pasivos. Tenemos causes hídricos muy bien protegidos, tenemos el valor agregado que es la vista y montes nativos muy buenos aun. El proyecto en sí se adapta a lo que con el tiempo buscamos. Por más de que no sea una finca muy grande, se busca la relación o conexión entre la producción y el cumplimiento de las normas y la sostenibilidad en el trabajo. Sinceramente es el único proyecto que conozco que viene buscando una interacción real entre todo. Nadie se interesa por el productor; el productor tiene un número de producción de hectáreas para un determinado rubro y tiene que vender. En cambio, Solidaridad entró con la intención de ver falencias y virtudes combinándolas para mejorar lo que son las falencias.
Como productor; ¿escuchaste a tus colegas o amigos hablar del proyecto? ¿Cuál es la percepción que tienen?
I: Con los que nos relacionamos hablamos de las actividades que emprende la cooperativa. Y en la asamblea se comentó sobre la integración de este proyecto. Hay gente que está más interesada que otra y en la comunidad se sabe que se está trabajando en esto. Hay un sistema de trabajo que difunde, a través de reuniones asamblearias o reuniones de línea, qué se está realizando y de ese modo se conoce.
¿Cuál crees que va a ser el beneficio último e impacto del proyecto?
I: El primer impacto va a ser identificar cuáles son las falencias y poder intentar corregirlas. Si vos le das un cumplimiento pleno a lo que es la normativa tanto ambiental, forestal, lo que es cumplimiento de leyes de SENAVE, por ejemplo, eso te da tranquilidad para producir sin tener inconvenientes con ningún organismo estatal. Esa es sinceramente la forma en que puede impactar el proyecto en las personas. Eso y dar herramientas administrativas. Muchas veces el productor no sabe ni qué tiene y así no sabe qué administrar. Siempre tenes que saber exactamente lo que tenés para poder saber administrar los recursos, y así se logra dar seguimiento. Depende mucho de capacitación e insistencia.
¿Y cuál crees que es el mayor desafío para llegar al productor?
I: El mayor desafío es no trabajar con el productor enfocado como individuo, sino integrar a la familia para que participe de las reuniones. Tiene que haber participación de la mujer ya que es la base de la casa. También de los hijos, porque si ellos no participan las decisiones se toman unilateralmente y no hay nadie que pueda llamarle la atención al productor o padre para poder seguir corrigiendo. Este modelo de trabajo es familiar y si uno no más toma la decisión no quiere cambiar.
¿Crees que el proyecto pueda ser modelo para más adelante o que se replique?
I: La replicación del proyecto puede ser factible en otros lugares bajo un modelo de cooperativa. Hoy las cooperativas se constituyen a nivel rural en el medio más fuerte de confianza para llegar al productor. Hoy la solidez de las cooperativas a nivel productivo hace que el productor se sienta protegido y confía en que la información que la cooperativa le trae le va a ayudar y servir para producir más y llevar un mejor nivel de vida.