El bloqueo mundial actual nos ha obligado como sociedad global a tomar una pausa y evaluar la forma en que definimos ciertos aspectos de la vida, como el éxito y la felicidad, la forma en la que hacemos negocios, y nuestra comprensión fundamental del trabajo. Ahora, todo está relacionado con teléfonos inteligentes, computadoras, software, plataformas, aplicaciones e Internet. Esto nos ha hecho notar cuán dependientes somos de la tecnología. Pero, ¿cómo es la «vida en tiempos de COVID» para aquellos que no tienen acceso a Internet? ¿Qué están haciendo los agricultores en las zonas rurales para mantenerse al día con las rutinas educativas diarias de sus hijos? ¿Cómo se enfrentan o incluso obtienen información precisa sobre el impacto de COVID en su economía?
La brecha digital se refiere a la diferencia en accesibilidad y uso de tecnologías de información y comunicación para ciertas personas o grupos. Todavía hay más de tres mil millones de personas en todo el mundo sin acceso a internet. E incluso entre aquellos con acceso, existe una división entre los que saben cómo usar la tecnología y aquellos que solamente saben lo suficiente para arreglárselas. La brecha digital se da por varios factores, incluidas las condiciones socioeconómicas, la geografía, la etnia, el género o la edad. Los agricultores de las naciones en desarrollo a menudo enfrentan la confluencia negativa de todos estos factores.
La ambición de Solidaridad de convertirse en una organización enfocada en el manejo de datos es más urgente que nunca. Según el índice industrial de digitalización del Instituto Global McKinsey, la agricultura es el sector económico menos avanzado cuando se trata de digitalizarse. Por lo tanto, nuestro objetivo es no solo mejorar nuestros servicios e intervenciones, sino también apoyar a los productores a tomar decisiones utilizando información en tiempo real y, al tener mayor acceso, ayudar a reducir la brecha digital.
Productores de cacao en Nicaragua usando la aplicación de estimación de cosecha
ACTIVIDADES CLAVE:
Desde 2018, Solidaridad ha estado desarrollando e integrando herramientas digitales que facilitan el intercambio de información detallada y contextualizada con los productores sobre sus parcela y sus cultivos.
En Centroamérica, Solidaridad ha priorizado el uso de encuestas digitales utilizando dispositivos móviles y paneles de control de toma de decisiones para identificar en tiempo real, por ejemplo, deficiencias en los cultivos. Esto permite a los técnicos de campo y gerentes de proyectos concentrar los recursos en las necesidades más inmediatas. Una vez que se han identificado las necesidades, se pueden definir y dar seguimiento a planes de trabajo para mejoras comunitarias y personalizadas, utilizando herramientas digitales para medir el impacto y los resultados en productividad, calidad, adopción de buenas prácticas agrícolas, protección de la biodiversidad o deforestación.
Si bien Solidaridad no puede crear la infraestructura requerida para brindar acceso en áreas remotas, podemos compartir herramientas digitales con nuestros socios e involucrarlos en la creación conjunta de nuevas tecnologías digitales para garantizar que respondan a sus necesidades reales en el campo.
Personal de campo que acompaña a los productores en la adopción y descubrimiento de este nuevo mundo digital
RESULTADOS RELEVANTES DE ESTE ENFOQUE EN CENTROAMÉRICA:
- Se empodera a los usuarios. Solidaridad está desarrollando herramientas utilizando un enfoque de diseño centrado en el medio ambiente y posicionando a los productores como usuarios finales, brindándoles acceso a metodologías e información que los capacita para mejorar sus rendimientos y la gestión general de la parcela. Gracias a este enfoque, los productores de cacao en Nicaragua pueden aprender a través de una aplicación móvil fuera de línea cómo estimar su cosecha y cómo reducir la cantidad de fruta dañada o por debajo de la norma. Los productores de palma aceitera también pueden aprender cómo estimar su cosecha e identificar la mejor opción de fertilización, de acuerdo con el análisis de suelo y foliar, sin el apoyo adicional de técnicos de campo o servicios de extensión.
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Los pequeños productores tienen acceso a herramientas digitales. Hemos desarrollado herramientas digitales que apoyan a los pequeños productores de café en México, que pueden recibir recomendaciones sobre cómo mejorar la calidad de su grano en base a un análisis SCAA (Asociación Americana de Cafés de Especialidad) en tiempo real de la calidad de su taza. En Honduras, las imágenes satelitales se utilizan para apoyar el cumplimiento del compromiso sectorial de Cero Deforestación, y cámaras trampa ayudan a monitorear la protección de la biodiversidad en las plantaciones de palma aceitera, en un país donde el 75% de los productores son pequeños propietarios.
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Los productores tienen acceso a información relevante. En muchos casos, las personas no pueden encontrar información, servicios en línea o aplicaciones web y móviles en su lengua materna. Además, para ser inclusivos, hay que facilitar recursos para todos los niveles de lectocomprensión. En Nicaragua, los ganaderos reciben en su celular información en tiempo real de las estaciones meteorológicas, y alertas tempranas sobre la proliferación de plagas y enfermedades, así como recomendaciones sobre cómo prevenir los riesgos relacionados con el cambio climático. Todo el contenido está en español, apoyado con recursos gráficos.
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Se aborda la brecha de género. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que las mujeres representan entre el 70% y el 90% de la fuerza laboral agrícola en los países en desarrollo, pero están en la parte inferior de la escala socioeconómica y tecnológica. En México, nos unimos al Instituto Tecnológico de Ciudad Valles para implementar un diplomado técnico, con un módulo centrado en el uso de herramientas digitales, en el que mujeres y jóvenes pertenecientes a las familias de pequeños productores fueron capacitados en el cultivo y la cosecha sostenible de la caña de azúcar.
La información permite a los productores tomar decisiones mejores y más oportunas
PRÓXIMOS PASOS
Solidaridad desarrolla sus herramientas digitales con el entendimiento de que la tecnología es disruptiva para los productores en el campo. Por lo tanto, no solo las herramientas deben ser intuitivas y fáciles de usar, sino que nuestro personal debe estar preparado para acompañarlos en la adopción y el descubrimiento de este nuevo mundo digital, al tiempo que brinda apoyo en prácticas agrícolas sostenibles.
La información permite a las personas tomar decisiones mejores y más oportunas que pueden reducir costos, aumentar sus ganancias, salvaguardar los recursos naturales y garantizar que las empresas puedan prosperar. Reducir la brecha digital será clave para desbloquear el potencial de los pequeños productores.
COVID ha demostrado que todavía hay muchos desafíos en el sector agrícola que deben abordarse: logística, acceso a mercados con precios justos, acceso a insumos y a servicios financieros; También demostró que la interdependencia entre los actores en las cadenas de valor es enorme y que aquellos en la base de la pirámide merecen recompensa y reconocimiento por ayudar a mantener los alimentos en nuestras mesas. Muchas cosas necesitan cambiar para resolver estos vacíos. En Solidaridad, creemos que las herramientas digitales nos ayudarán a adaptar los servicios para que sean cada vez más accesibles, asequibles e inclusivos de las zonas rurales y el sector agrícola. También sabemos que no podemos hacer esto solos, por eso trabajamos con socios a lo largo de la cadena de valor en el diseño e implementación de nuestras soluciones digitales.
Definitivamente seguiremos hablando sobre este tema, porque si queremos alimentar al mundo ante los retos actuales, los productores deben ser parte de la revolución digital.
¿Ha tenido alguna idea para luchar contra la brecha digital? Continuemos la conversación.
INFORMACIÓN DE CONTACTO:
Jessica Murcia
ICT Centroamérica, México y El Caribe
